Los organizadores se mostraron, con todo, satisfechos por la taquilla que hizo el cantante británico cuando informaron hoy de que tras el gran éxito de la noche inaugural, 41.000 personas acudieron al segundo de los cinco días del festival, que se reparte entre este y el próximo fin de semana.

El segundo plato fuerte de la noche de Sir Elton fue Leona Lewis, cuyo pop/soul fue celebrado por un público mucho más joven que el veterano vocalista, aunque también mucho menos entusiasmado que el que bailó y coreó las pegadizas canciones de la cantante colombiana.

El cartel del sábado no resultó tan atractivo como el de la víspera, que además de Shakira, reunió a la brasileña Ivete Sangalo, John Mayer y la siempre novedosa fadista Mariza que esta vez se aventuró con un tema de Nirvana.

La presentación de Elton John la cerraron varios artistas lusos y una selección de DJ internacionales que mantuvieron viva la música electrónica en la Ciudad del Rock hasta la cuatro de la madrugada.

La crítica elogió hoy, aunque sin grandes calificativos, al vocalista británico, correcto y sin defraudar a nadie en un paseo por varios de sus éxitos en el que demostró una calidad vocal que no pierde matices con el paso del tiempo.

"Funeral for a friend", "Love lies bleeding" o "Saturday night", fueron algunos de los temas con los que el cantante, acompañado siempre de su piano y menos estrafalario que en otras ocasiones, deleitó a una audiencia en la que se adivinaban muchos incondicionales.

El polifacético Rock in Río, al que acude todo tipo de público, desde rockeros o fanáticos de la música electrónica y el rap hasta familias con niños al reclamo de viejas glorias del pop, como Elton John, incursiona la próxima semana en la fructífera cantera del pop juvenil con Miley Cyrus.

La presentación, el próximo sábado, de la joven cantante norteamericana de 17 años, que se hizo famosa con la serie de televisión para adolescentes Hannah Montana, de la factoría Disney, va a convertir el Rock in Río en un gran espectáculo para quinceañeras.

Hoy domingo, la tercera jornada de esta cuarta edición del festival discurre por senderos menos transitados con la actuación del trío inglés Muse como estrellas de la noche.

Completan la oferta del cierre del primer fin de semana del Rock in Río Lisboa los portugueses Xutos y Pontapés y los irlandeses Snow Patrol, que han cosechado, desde que se presentaron con el nombre de Polar Bear, un notable éxito en la escena alternativa del Reino Unido.