La dominicana María Montez fue una de las divas latinoamericanas más admiradas del cine estadounidense de los cuarenta. Cuando Hollywood vivía sus años de esplendor, recibió el título de la Reina del Tecnicolor por lo bien que lucía en las películas filmadas con la entonces novedosa técnica.

En la colonia del cine se le conoció como la Sirena de Hollywood por su escultural figura e imponente presencia.

En 1942 saltó a la fama luego de protagonizar la película Arabian Nights, Las Mil y Una Noches, cuyo director fue John Rawlins. A ésta siguieron muchas otras, entre ellas, una de las más conocidas es Alí Babá y los Cuarenta Ladrones, dirigida por Arthur Lubin. Así como The Exile, dirigida por el talentoso Max Ophuls y siendo María Montez coestrella en ese filme de Douglas Fairbanks, Jr.

Eran tiempos de guerra y determinado tipo de cine sirvió para sobrellevar la inestabilidad provocada por el conflicto que abarcaba todo el mundo. En medio de las vicisitudes, los espectadores adoraron el exótico rostro de la estrella dominicana vestida al estilo de una princesa del Lejano Oriente o de algún paradisíaco lugar en que se desenvolvía la trama de la película protagonizada por la misma.

Años más tarde, el conocido escritor español, Terenci Moix, afirmó que María Montez encarnó como ninguna otra las necesidades de evasión de un mundo en guerra.

Su camino al éxito
Su fama trascendió su desaparición física en 1951, en la plenitud de su vida y de su carrera cinematográfica. Tras su lamentado deceso ocurrido en circunstancias no muy claras, ya que sucedió mientras tomaba un baño con agua caliente en su casa, ha ido convirtiéndose gradualmente en una de las figuras más recordadas del Hollywood de los cuarenta, sus seguidores se han ido multiplicando por doquier.

Tanto Arabian Nights, Las Mil y Una Noches, como Alí Babá y los Cuarenta Ladrones, al igual que muchas de sus películas más conocidas pueden adquirirse hoy en DVD. También existen diversos sites dedicados a la Reina del Technicolor de los años cuarenta, a los que puede accesarse fácilmente en la internet.

En Francia, donde fue filmada la película Portrait d’un Assassin bajo la dirección de Bernard Rolan se le recuerda, vivamente, por su actuación junto a personalidades del cine de la época: Erick Von Stroheim, Arletty, Pierre Brasseur y Marcel Dalio.

Latina de relieve
En América Latina se mantiene vivo su recuerdo, tanto en su país de origen, la República Dominicana, como en otras naciones del continente.

En Brasil, donde nació su contemporánea, la eximia Carmen Miranda, figura latina de gran relieve en los años cuarenta, acaba de ser publicada una obra dedicada a la vida artística de la diva brasileña en la que se hace referencia a la trayectoria de María Montez en el Séptimo Arte.

En Italia, que sirvió de marco a la cinta Il Ladro di Venecia, cuya protagonización fue considerada por la crítica de la época como la mejor actuación de toda su carrera, María Montez es también considerada figura inolvidable de la época en que vivió.

Asimismo, ha sido reeditado el DVD de la película That Night in Rio, dirigida por Irving Cummings, en la que Carmen Miranda aparece siendo ya una consagrada artista y Montez se encuentra en la etapa inicial de su carrera.

La Reina del Tecnicolor de los años cuarenta, los años dorados de Hollywood, tendrá por muchos años un espacio asegurado en el ámbito del cine.

Siendo una de las razones por la que se convirtió en mito, su muerte a destiempo y en circunstancias no bien esclarecidas, que todavía hoy es motivo de elucubraciones en libros dedicados a los hechos misteriosos ocurridos en la vida de las luminarias.