JUANES UN ARTISTA QUE GUSTA A TODOS
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Las buenas intenciones que pregona el colombiano, nacido hace 36 años, tiene el poder de llegar a todos, incluidos niños pequeños, quienes en compañía de sus padres se gozaron la fiesta de la vida que según el músico, es un ratico.
A parte de sus canciones y su música, Juanes habló mucho a un público que le dispenso el mejor de los tratos. “Es bueno señalar que a pesar de la crisis que nos envuelve hay cosas más importantes en las que invertir el tiempo. Esas cosas son los hijos y ustedes”, dijo en una de las tantas veces que se dirigió a los presentes.
La audiencia se rindió a los pies de uno de los más importantes exponentes del pop latinoamericano y triunfador de la séptima versión de los Premios Grammy Latinos celebrada el pasado jueves.
A parte de los seguidores dominicanos, un grupo de fans del artista de distintas nacionalidades (alemanes, franceses y por supuesto, colombianos). Los paisanos de Juanes llegaron con sus banderas de color rojo, amarillo y azul y sus sombreros de cana de rayas, con la firme intención de gozarse a su compatriota de principio a fin.
“Dios mio no lo puedo creer. No hay otra forma mejor de celebrar que estar aquí con ustedes”. dijo una de las primeras veces que se dirigió al público, evidentemente emocionado.
C o n la camisa negra, sus dos rosarios al cuello y acompañado de seis músicos, Juanes apareció en el escenario pocos minutos después de las nueve de la noche para fiestar con una multitud que se metió de inmediato en su juego.
El viaje inició con la conocida “A Dios le pido”, de su segundo disco, “Un día normal”, para continuar con temas “Mi sangre” y como no, de “La vida es un ratico”. Eso sí, el cantante no realizó ninguna canción de “Fíjate bien”, su primer álbum solista, luego de que Equimosis se desintegrara.
La escenografía incluía un sol naciente de metal detrás de los músicos desde el que salían luces de colores, mientras que tres pantallas devolvían, de manera agigantada, lo que sucedía en el escenario. Según la canción, estas pantallas proyectaban imágenes abstractas o figurativas.
El cantante se movió por el escenario tocando su inseparable guitarra eléctrica, con la que hizo varios solos que llenaron del espiritu rockero la noche, que transitó por un pop mezclado con ritmos latinos y folclóricos de colombia. No en vano la percusión tiene una importancia vital en la música del cantautor. Muestra de esa fusión que realiza Juanes fue la interpretación de “Bailala” que se introduce con una descarga de percusión que da paso al potente sonido de las guitarras.
Juanes dejó satisfechos a todos los asistentes luego de dos horas en las que se entregó por completo a darse gusto y a darle a los miles de fanáticos que le acompañaron en su celebración de que la vida es un ratico.
UN RAT ICO . .
Trujillo y las Mirabal En primera fila se encontraban Trujillo y las Hermanas Mirabal. Claro que en la ficción. Los actores de la película “Trópico de sangre” que se filma en la actualidad en Santo Domingo, Juan Deláncer no perdieron la oportunidad de ver al interprete colombiano en acción.
La actriz de Hollywood, Michell Rodríguez, quien es Minerva Mirabal en el referido filme llegó acompañada de Juan Fernández, quien encarna al tirano, Celinés Toribio (Dedé Mirabal) y la actriz Claudette Lalí (Emilia Bencosme en el filme).
Entre el público se encontraban Saymon Diaz, de SD Concerts y Pedro García de Skypro, colegas de Gamal Haché, quienes se gozaron el show de Juanes. Contrario a otros espectáculos realizados en el Palacio de los deportes, esta vez el sonido fue bastante bueno.
Varias chicas subieron al escenario para abrazar y besar a su artista. Dos de ellas lo lograron, otras dos se quedaron con las ganas.
Algo que hay que destacar es el efectivo y respetuoso trabajo de los miembros de la seguridad que estuvo a cargo de la compañía Jigasa con Adrian y Fernando Jiménez a la cabeza.
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