Xiomara ha tenido la fortuna de ser un ente humano con muchas bendiciones. Según ella, la primera de ellas fue haber nacido en este país, en segundo lugar está el poder transmitir sus pensamientos a través de su voz (muy particular por cierto) y así siguen llegando a la vida de esta carismática artista las buenas nuevas.
La más reciente ha tenido que ver con su salud. Hace poco que la intérprete de la “world music” le diagnosticaron un cáncer de seno, que gracias a las oraciones y a la detección temprana pudo vencer.

Ella, que ha sido un ser humano agradecido de todo lo que ha recibido, reunió un grupo de amigos recientemente en un concierto para juntos manifestar su gratitud a todo el que elevó una plegaria por ella.

“Agradezco a todos los grupos religiosos de todos los barrios que me pusieron en oración; quiero agradecerle a mis compañeros, los artistas, y a todo ese público que estuvo allí para decir conmigo gracias y abrazar la vida”, comentó a LISTÍN DIARIO la intérprete de “Ella ’ta ahí”.

Al descubrir que a su vida llegó uno de los peores enemigos de este tiempo: el cáncer de seno, su mente se quedó en blanco aunque luego de unos segundos reaccionó y dijo: “Vamos a salir de esto”.

Una bendición...
Cuenta que fue una bendición el poder detectarlo a tiempo y que posteriormente la operación saliera bien. “Sólo lo divino puede ayudar a uno en momentos como éste”.

Tras esta etapa Xiomara cuida más su alimentación y está más pendiente de su persona y su cuerpo, porque insiste en que quiere disfrutar mucho más y hacer muchas cosas. “Quiero seguir abrazando la vida” y, sin perder tiempo, continuar cultivando lo que sabe: la música.

Fue desde pequeña que esta artista se dio cuenta que lo de ella era cantar. En la reuniones familiares a ella le tocaba a animar a los presentes con su voz, posteriormente ella daba un recital de conciertos en el baño de su casa en su natal Montecristi.

A la vez que una se visualiza como cantante lo próximo sería definir el estilo, pero eso también ella lo tenía calculado.

“Desde que yo decidí que quería ser artista a los 12 años, decía que sería diferente, que no sería como las artistas que ella veía en la television. En su casa escuchaba la emisora cubana en un radito, escuchaba muchos artistas de la trova como a Mercedes Sosa. De ahí su influencia, lo que ella valora mucho.

Fue en el teatro que Xiomara encontró la puerta para hacer lo que quería y soñaba: cantar. A los 12 años comienza su transcurrir en las tablas. Al terminar cada obra le daban la oportunidad de cantar tres canciones y era la ocasión de ella destacarse. Llegó el momento, según cuenta a LISTíN DIARIO que el público pedía esas canciones.

En el año 1978 dio su primer paso a la internacionalizacion como solista. Jamaica, Cuba, Haití recibieron a la intérprete criolla con los brazos abiertos, por eso ella reconoce que esta primera gira fue “un gran empujón, porque pude cantar con Danny Rivera, Lucecita Benítez, y los grupos de protesta del momento”.

En la música que hace esta montecristeña hay una fusión interesante, un elemento que casi siempre está presente es el regae, “me gusta mucho el bit del regae”, de igual manera fusiona bastante con la música brasileña y ante todo del jazz, pero su más reciente influencia le ha llegado del rock.

Xiomara sabe que existe el racismo, mas, reconoce que tiene la suficiente madurez como para saber manejarlo pese a que ella no se ha sentido nunca marginada por ser negra. “Tengo una autoestima muy buena desde pequeña”, dice, y confiesa que en esta etapa tiene mayor madurez para aceptar que existe esta problemática.

En otra faceta
Xiomara también se ha involucrado en otras causas a favor de lo que cree, es una amante de la naturaleza y por eso junto a unas amigas fundaron el Centro de Educación Medioambiental, que es un ambiente que procura conservar y poner al visitante en contacto con la naturaleza que le rodea. Este centro queda entre Baní y San Cristobal en la loma de Dubó, es un espacio que sobre todo vende silencio. Allí se realizan actividades y se presta para la realización de fiestas navideñas, talleres, reuniones familiares y hasta bodas. Es otra de las grandes pasiones de la artista, la que que también le toma un poco de tiempo.

Hay muchas cosas que preocupan a esta polifacética mujer que tiene entre sus principales pasatiempos, escribir, cantar, tocar guitarra, pero ante todo disfrutar de la tranquilidad que le permite meditar.

“Soy estudiosa de las obras de arte de la humanidad y de la literatura, me hace un ser sensible y responsable con el papel que me toca jugar como artista”, comenta.

La obra del artista, indica, es un resultado de su entorno. “Soy muy sensible de lo que veo, a los padeceres de la persona, a las injusticias, soy una luchadora para que las personas logremos vivir con dignidad”, agrega, convencida de su misión en esta tierra.

MÚSICA
Xiomara Fortuna tiene unas siete producciones musicales a lo largo de toda su carrera, es mucho a juzgar que es una solista que recibe poco apoyo debido al tipo de música que también hace, para muchos demasiado avanzada y para otros lo adecuado para el momento.

Pero ella ha priorizado grabar su música, “invierto en eso, quiero dejar mi obra, que la gente la tenga. Quizas este momento no es para que mi música sea masiva, sé que tendrá su momento y su explosión”, confiesa, segura de lo que hace.

La califica como una música con contenido, buenos arreglos, buena grabación, sonidos futuristas lo que le permitirá perdurar en el tiempo y que las generaciones puedan tenerla debido a que es un gran testimonio “de lo que somos como país y pueblo, ya que en ella recogo algunas leyendas, mitologías, personajes de la historia, me gusta visibilizar algunas personas que han aportado a la historia de un país, como Mandela y Juana Saltitopa, entre otras”.

Su más reciente producción la ha titulado “Tonada para un querer” ya está casi lista; la define como una producción amplia en términos musicales y de contenido. Para ella es más que World Music.

“Yo realmente paseo por todos los ritmos afrodescendientes, es una experiencia chula porque saltamos de una país a otro como si nada, es un viaje maravilloso sin tener que subirse al avión”, cuenta, contenta de los resultados que ha obtenido en este disco que espera que pronto esté en el mercado.