Estos dos, si llegan a haber nacido caracoles, les habrían echo un favor porque se tiran la mitad de sus vidas de mudanza: casa arriba, casa abajo…si al menos la llevaran pegada a la espalda, eso que se ahorraban en el camión.
Brangelina, que así es como conocemos a la pareja formada por Brad Pitt y Angelina Jolie, han cambiado su lugar de residencia puntualmente y abandonan la France para marcharse a una impresionante mansión en Long Island, Nueva York. Aunque la verdad es que lo que tenían en Francia no podía considerarse precisamente una choza.

La casita que han adquirido, por alquiler, es de estilo Tudor y está situada frente al lago Sassafras. Viene a estar valorada en 60 millones de dólares (unos 47 millones de euros) entre la casa y todo el terreno que la rodea. La numerosa familia, que sinceramente cada día me recuerdan más a la tribu de los Brady, está formada, recordemos, por los dos pequeños mellizos, Vivienne y Knox, la primogénita Shiloh y sus hermanos adoptivos Maddox y Zahara, piensa instalarse próximamente debido a motivos profesionales (de los padres, claro está): Angelina Jolie quiere estar más cerca del lugar de rodaje de su próxima película, “Edwin A. Salt”, que tendrá lugar en la Gran Manzana, minimizando así todo el estrés que dice, conllevan los continuos viajes en avión desde Europa.

Vamos que ellos que pueden permitírselo pero, el resto de los mortales no pagamos 47 millones de euros (que se dice pronto) para evitar el estrés del viajero. En fin, quién pudiese…