La brasileña hizo alarde de su belleza natural mientras tomaba sol en la terraza del Hotel Copacabana, donde se hospeda en Río de Janeiro.
Gisele conversó con sus amigas y sus hermanas durante sus momentos de relax en la pileta del lujoso complejo y evitó exponer su rostro al sol para prevenir la aparición de arrugas.
La modelo mejor paga del mundo se escapó por unos días de su apretada agenda de desfiles para acudir al Carnaval más conocido del planeta.

Si bien se había rumoreado que Bundchen estaba planeando su boda con el jugador de fútbol americano Tom Brady, la diosa no tardó en desmentir las versiones.

"No sé cómo la gente es tan creativa”, exclamó al respecto.