La idea era rendir tributo al boricua Polito Vega por su 50 aniversario en la radio, o lo que es lo mismo, como voz fundamental a la hora de difundir la música latina en Nueva York. La fiesta, que escogió por escenario el Madison Square Garden, se convirtió en una histórica pasarela de lujo por partida doble.
Una primera entrega congregó lo mejor del pop actual e incluyó a Don Omar para su cierre; la segunda, un coctel tropical en el que no faltó el merengue ni la bachata.

La entrega, durante las noches del viernes y el sábado, marcaron precedentes en el Madison. En medio de la crisis, 40 mil personas acudieron con todo el entusiasmo del verano a disfrutar de un maratón de íconos del pop actual como Enrique Iglesias o Paulina Rubio y de una descarga tropical huracanada.

Félix Cabrera, Polito Vega y la emisora La Mega demostraron el poder que tienen en una industria que intenta reinventarse en medio de la crisis discográfica.

Merengue, salsa y reguetón La segunda velada de este homenaje dejó varios puntos claros si de la música tropical se trata: Olga Tañón es capaz de doblegar al público más exigente con sus movimientos de caderas y su fuego; Milly Quezada volvió a dar muestras de su veteranía.

Toño Rosario dejó claro que él es mucho más que un merenguero: es un showman.

En tanto, que su hermano Rafa repitió sus hazañas anteriores. Rafa y Los Hermanos Rosario no hicieron otra cosa que poner al público del Madison de pie.

En la cartelera no podía faltar Héctor Acosta. Hoy “El Torito” puede cantar el tema que desee, viejo o nuevo, pero jamás logrará lo que puede hacer con “El Anillo”. Si Henry busca una carrera en solitario, esta noche no fue su mejor carta de presentación.

En cambio, José Alberto “El Canario” trinó, y bien, mientras Víctor Manuelle y Gilberto Santa Rosa demostraron por qué son dos de los grandes de la salsa. El tiempo, uno de los peligros en estos maratones musicales, hizo de las suyas, si alguno que otro se hubiera extendido menos, La India y De León hubieran tenido mejor suerte.

POP, JUANES, CHICAS SEXYS Y BUENA MÚSICA
Cada quien dejó claro lo que era y el lugar que ocupa en la cartelera musical actual, luego de 30 minutos en el escenario.

Los reyes indiscutibles de la noche: los españoles Enrique Iglesias y David Bisbal; Luis Fonsi y la italiana Laura Pausini.

Juanes ni siquiera tenía previsto cantar, sin embargo, la fuerza imparable de los presentes le obligó a tomar la guitarra e interpretar un par de canciones.

Enrique Iglesias quiso convertir su paso por el Madison en un momento especial, luego el chico de las Bulerías le siguió los pasos. Horas más tarde regresaba a tarima para unirse a Luis Fonsi en un dúo. Alejandro Sanz abrió con un tema al piano y cerró con “Corazón partío”.

Hacer desfilar una cartelera de artistas como esta puede ser peligroso para algunos. De eso supo muy bien Paulina Rubio, quien fue uno de los desastres de la noche. El otro, Gloria Trevi. Ellas fueron los puntos más bajos de la cartelera que cerró Don Omar después de la medianoche.