En los 80, Madonna marcó las pautas en la industria musical y de la cultura de toda una década con sus irreverencias y controversiales temas. En los noventa las “niñas buenas” se impusieron, siendo las líderes Britney Spears y Christina Aguilera. En sus inicios, apenas mostraban sus ombligos y hasta llegaron a afirmar que llegarían vírgenes al matrimonio.

Idea que cambiaron apenas entró la primera década del siglo XXI, donde con el ritmo de sus continuos escándalos y sus deseos de ser vistas como adultas sensuales trajeron de vuelta la controversia como estrategia.

Táctica de la que se han adueñado destacadas exponentes de la actual generación de intérpretes femeninas, quienes han aprovechado el precedente que han sentado grandes figuras para convertirse en celebridades de la música en un tiempo corto.

De esta lista, la primera en robarse la atención del mundo fue la inglesa Amy Winehouse, quien además de su melodiosa voz, se aseguró de que fuera imposible no hablar de ella al verla utilizando vestimentas completamente fuera de lo convencional así como un alto y voluminoso peinado, similar a una colmena de abejas.

Mientras que la cantante Lady Gaga solo cambió su color de pelo para no ser confundida con Winehouse, pero en su conducta y estilo es una pupila aventajada de la intérprete de “Rehab”, con las más ridículas de las vestimentas acompañadas de peinados y maquillajes irrisorios.

Sin embargo, no es su manera de vestir la que las mantiene activa en los medios.

Son sus constantes declaraciones y acciones escandalosas lo que las ha hecho a todas más interesantes.

Katy Perry le relata sus confidencias más personales a todo el que escucha sus canciones, pues la artista aseguró que no escribe de nada que haya experimentado, razón por la que canciones como “I kissed a girl” y “Ur so gay” han resultado aún más cautivantes para los jóvenes.

Mientras que a Lilly Allen la falta de pudor le ha resultado tan bien que ha llevado a que muchos que desconocían de su existencia busquen sus videos solo para ver tanto puede mostrar en los mismos. No obstante, es en sus conciertos donde verdaderamente se “destapa” para sus seguidores.

El alcohol, las drogas y las preferencias sexuales de estas chicas suelen ser los encabezados de noticias que relega a un segundo plano su trabajo.

LA MAESTRA DE LA CONTROVERSIA
Sin duda alguna Madonna es la maestra de la “generación escándalo” que actualmente lídera y se impone en todo el mundo. Desde sus extravagantes vestimentas hasta su abierto libertinaje la han mantenido en el tope por más de dos décadas.

La mayoría de las artistas que ocupan los primeros lugares de popularidad crecieron bajo el influjo de la controversia constante de la reina del pop; algunos de los escándalos que protagonizó involucraron a la Iglesia católica, por la irreverencia con que utilizó la imagen de santos y crucifijos en el video del tema “Like a Prayer”.

Su falta de pudor quedó al desnudo en un video lésbico y un libro de sexo que publicó.