Desde el pasado 22 de febrero, la teleserie homónina al libro de la escritora colombiana se transmite en horario estelar por el canal Sony, y ha obtenido unos ratings tan elevados, que han motivado a los ejecutivos del canal a dar el visto bueno para realizar una segunda temporada, que ya ha sido confirmada.

Tal parece que las tramas vivenciales de las féminas se han traducido en la clave del éxito en la pantalla chica.

Este dato ha sido aprovechado por los guionistas y creativos de la televisión y el cine para asegurar el éxito de sus propuestas, buscando diferentes vertientes del tema, pero sin cambiar la esencia, es decir, la trama basada en la mujer y sus dilemas ante un retador mundo que cada vez exige más.

Uno de estos ejemplos ha sido la vida de Cristina Oviedo (personaje central de “Los caballeros las prefieren brutas”) el cual comparte algunas particularidades con los de otros proyectos como “Sex and the city”, teleserie de HBO que logró marcar los más altos índices de rating durante los seis años que se mantuvo en el aire y que luego pasó a la pantalla grande con dos entregas igualmente exitosas en taquilla.

Carrie Badshaw (personaje principal de “Sex and the city”) comparte con Cristina Oviedo, el hecho de ser una mujer hermosa, con triunfos profesionales, pero con serios problemas para encontrar el amor. Fórmula que también funcionó en el cine con la cinta “El diario de Bridget Jones” y continua encontrando variantes en la televisión en propues tas más recientes como es la teleserie “Cougar Town”.

De igual manera han alcanzado la aceptación del público otras producciones alejadas de la temática de la búsqueda del compañero ideal, centrándose en otras realidades como: La vida después del matrimonio, Desde una cárcel de mujeres, Asumiendo la maternidad sin compañero o La vida tras un divorcio.

HISTORIAS UNIVERSALES
Las producciones con tramas femeninas que han marcado precedentes, se han originado en su mayoría en Estados Unidos, motivando así a otros países a probar la fórmula para propuestas adaptadas a diferentes contextos culturales.

En Latinoamérica, por ejemplo, se han adaptado proyectos como “Desperate Housewives” en una versión que reunió a actrices de diferentes países en una producción mexicana que distó mucho de los resultados que obtuvo la original.

Muy diferentes dividendos ha obtenido “Mujeres asesinas”, también mexicana, la cual ha alcanzado popularidad y prestigio en Latinoamérica.