Hoy sale al mercado su nueva producción discográfica, cuyo primer sencillo “Vivir sin ti” ya se escucha con fuerza en la radio
Cuando tenía 12 años y veía las actuaciones del Gran Combo por televisión se quedaba embelesado viendo a la legendaria banda. “A veces hasta se me enfriaba el almuerzo y mi mamá me daba cada regaño que ni te imaginas. Así como uno ve a los muchachitos enrollándose una capa en el cuello con ganas de ser Superman, yo agarraba un cepillo con ganas de ser el Gran Combo. Mi sueño era ser cantante”, comenta complacido Gilberto Santa Rosa que hoy lanza al mercado su nueva producción discográfica Irrepetible.

“Sentí que el disco se debía llamar así por dos motivos. El primero, cada producción es irrepetible. Los aciertos y los errores que cometes en cada tema y en el disco entero no se van a repetir más y porque en este disco traigo algunos dúos con amigos entrañables y eso también creo que no se va dar otra vez”. La nueva producción del salsero de 48 años incluye diez temas entre los que se cuentan: “Vivir sin ti” – primer sencillo que lleva sonando con fuerza varias semanas en la radio–, “La ventana”, ‘Y tú, y yo”, “Aunque llueva”, “Vodka con limón” y “Me cambiaron las preguntas”, los cuales interpreta junto a artistas como Rubén Blades, Johnny Ventura,Kanny García, Guaco y Felipe “Pipe” Peláez.

Amable como siempre, el Caballero de la salsa, conversa relajado sobre su nueva producción y explica que; “estos dúos no fueron una cosa de disqueras. Nadie nos impuso que cantáramos juntos. Se dio porque todos ellos son mis amigos. Hablando con ellos me di cuenta que el mismo cariño que yo siento por ellos, el mismo respeto y admiración que tengo por su trabajo ellos lo tienen por el mío. Así que no fue sino ponernos de acuerdo y meternos en el estudio”.

Sin embargo, hay una canción dentro de la producción que rompe el esquema romántico al que nos tiene acostumbrados el multipremiado puertorriqueño y es “Me cambiaron las preguntas”, la que interpreta junto a Rubén Blades. “Se me antojó decir una ironía social, porque son las mismas preguntas que nos hacemos siempre. Hay muchas contradicciones que los dirigentes y los gobiernos no nos responden. Por ejemplo – y aquí estoy hablando a título personal– yo estoy genuinamente preocupado por la guerra, por todas las guerras que se libran en el mundo. Es hora de que la humanidad empiece a reflexionar sobre la inmensa estupidez que encierran las guerras. El problema son los políticos, porque la mayoría deja de convertirse en un servidor público para convertirse en un político”, comentó el padre de cuatro hijos, quien también conserva la línea romántica que lo ha definido por más de treinta años de carrera.

“¿Cómo podría dejar de cantarle al amor? Ese día me muero. Además yo tengo una responsabilidad muy grande con la gente, en especial con los caballeros. Es como una solidaridad de género – dice entre risas el famoso salsero– Mira, yo reto a quien me busque una frase mas certera, más inteligente y más veraz que esa que dice que: ‘ a las mujeres no hay que entenderlas, hay que amarlas’.Tratar de descifrar la psicología femenina es como tratar de entender qué tienen en las carteras. Cuando una mujer te dice: ‘búscalo en mi cartera’. Hermano, prepárese porque lo necesitaba ya no lo va a encontrar. Hablando en serio, yo tengo que ser solidario con el público, con los hombres porque nosotros somos muy malos para hablar, entonces allí cuando usted quiere pedir perdón va y busca una canción de Gilberto, cuando quiere conquistar, enamorar y hasta cuando se quiere despedir de una relación y no encuentra cómo”.

En su opinión, el tema que define “el espíritu del disco” es justamente “Vivir sin tí” porque se trata de: “una canción que te despierta curiosidad, donde ves a un hombre hacerse el guapo, pero termina rindiéndose y reconociendo que en el amor uno no siempre tiene la última palabra”.

Siendo un músico tan experimentado y con tanto tino para llegarle al público latino, llama la atención por qué no se ha lanzado a la composición. Se sabe que sólo una vez escribió un tema “del que no quiero ni acordarme el nombre porque soy muy malo escribiendo. La canción era muy mala. Lo que pasa es que cuando la compuse era muy jovencito y uno a esa edad no tiene consciencia. Además, con todo respeto para mis colegas, en los setenta la mayoría de las letras eran muy livianas. Lo que sí tengo es ideas para las canciones, así que cuando se me ocurre algo llamo a algún amigo mío y le digo: ‘¡oye, aquí tengo este tema!’ para que le de la vuelta y escriba algo coherente”, comenta el laureado salsero, quien si bien es cierto que no quiere atreverse a componer si lo es que se ha aventurado varias veces en el teatro.

“El teatro me encanta. Lo hemos intentado varias veces y creo que no ha salido tan mal. Por lo menos todavía no me han lanzado el primer tomatazo. No hago más teatro por falta de ganas, sino por falta de tiempo. Pero siempre estoy esperando que alguien me invite a hacer teatro”. Y de la otra faceta que no pudo dejar de hablar fue del restaurante que abrió en Puerto Rico.

“El restaurante fue una locura que se nos ocurrió y si hubiese sabido que tan loco estaba cuando se me ocurrió la idea pues me echo agua fría en la cabeza – y vuelve a reírse al comentarlo–. Me siento contento porque la idea era abrir un lugar para los artistas, bohemios y locos así como yo. Un lugar para el arte y el encuentro. Además, con mucha humildad pues podíamos contribuir a generar empleos localmente. Por allí han pasado buenos amigos a cantar como Olga Tañón , Kanny García, El Gran Combo , Camila, Víctor Manuelle y bueno un gordito llamado Gilberto que tiene que ponerse tacones para que lo vean los de las mesas de atrás. Pero le aseguro que se come bien, así que cuando quieran pasar un buen rato pasen por allá”.
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