Aunque ha trabajado al lado de actores de la talla de Johnny Depp o Will Smith, nunca ha tenido un papel protagonista, siempre acababa siendo la chica guapa que acompañaba al intérprete principal. Ella lo asume pero ha decidido cambiar eso. Ahora seleciona más sus papeles y prefiere personajes en los que “no solo tenga que hacer de chica linda, la chica accesorio”.

Mendes, que define su belleza como no convencional, está metida por completo en estos momentos en la escritura de un guión de un cortometraje que ella misma dirigirá y cuyo argumento será “la historia de una mujer que encuentra su alma gemela la noche en que pierde su gato”.

Cuando la actriz de “2 Fast 2 Furious” echa una mirada a su carrera, dice que lo que ve forma parte de un plan pero, aclara, “también hay espacio para la espontaneidad.

Porque llega un momento que lo que puedes elegir es limitado”. Confiesa que la moda siempre le ha gustado pero que su verdadera pasión es, sin duda alguna, la interpretación.

Está convencida que ella no solo es una cara bonita y que aporta algo más al mundo del celuloide. Admite que a estas alturas aún sigo yendo a clases de interpretación. Así, “si me contratas, sabes que voy a hacer bien el trabajo”, sentencia.