La luz ilumina el alma, ayuda a tratar las depresiones con éxito además se les añade los colores los que actúan positivamente. La luz del sol actúa sobre la presión sanguínea, la constancia el estrés etc.., entra en nuestro cuerpo a trabes de los ojos y la piel , esta información de luz llega al celebro el que actúa regulando las funciones mas importantes del cuerpo. No por eso hay que ponerse al sol para broncearse en exceso puede ser muy perjudicial e innecesario, como minino hay que llevar una buena protección solar y las gafas de sol que no falten, y en invierno no olvidar disfrutar de vez en cuando de esta luz. Los olores también actúan favorablemente sobre nuestro cuerpo, los aceites etéreos no solo sirven para el disfrute de nuestros sentidos, sino que poseen efectos muy concretos para el alma y espíritu. Esta información del olor a nuestro cerebro llega a trabes de la nariz, por el sistema limbico el encargado de controlar el subconsciente y los sentidos y responsable de los recuerdos, influyendo en las funciones corporales. Los aceites de masaje y baño actúan a trabes de la piel, sobre la circulación sanguínea y los órganos donde despliegan todo su poder curativo. Es importante y decisivo utilizar la buena calidad para un mejor efecto, los aceites etéreos puros de la naturaleza garantizan las características deseadas. Los aceites artificiales contienen materias químicas que a la larga resultan perjudiciales para la salud. Así que si mezclamos aceites corporales deben ser de alta calidad de buena jojoba, de nuez macadamia, o el aceite de almendra dulce que contiene meterías curativas las. Todos los aceites actúan de forma especial, por ejemplo: jadmin, rosa, benzoe siam, palo de sándalo, vainilla o ylang-ylang, muy buenos para consolar el alma. Para relajar y animar los aceites y aromas: lavanda, basilisco, bergamota, geranio, o canela. Para estimular y también animar: pino blanco, lima, mandarina, naranja o pomelo. Para aclarar el espíritu y dar ímpetu: hierba de limón, romero o hierbabuena. Y para fortalecernos interiormente: angélica, cedro, ciprés o vetiver, estos nos da nuevos ánimos.

Sugerencia; poner dos gotas de hierbabuena en la punta de los dedos y masajear suavemente la cabeza, desde el el cuellos hasta la sien, es muy efectivo contra el dolor de cabeza y la resaca.