Pese al trasnoche, Felipe Heredia, padre de Martha, abrió ayer el taller de mecánica temprano. Anteanoche, más de mil personas se agolparon en su negocio para esperar el desenlace del reality que la gente siguió desde distintas pantallas y escenarios quisqueyanos.
Una sábana de letrero con la foto de su hija colgó el padre en la entrada del taller metamecánica Pedro Heredia, donde la vecindad del Ensanche Ramos hizo llover cerveza cuando anunciaron a la dieciochoañera dominicana como reina del concurso Latin American Idol.

En otro costado de la ciudad, la voz y temple de Martha Heredia inflaron las venas del Monumento. Las vías que ella tantas veces ha recorrido se llenaron de almas que gritaron su regocijo hasta la madrugada.

En Puerta del Sol by Marchena, lugar que concentró a los fanáticos más bullangueros, no cabía ni un susurro.

Cuando al fin fue coronada, la gente se tomó de las manos y hubo salto y grito por un tubo y siete llaves.

El triunfo ha alterado la rutina laboral de Felipe Heredia.

El hombre de 49 años (espera el nacimiento de su sexta hija Amelia), anda de estudio en estudio de televisión.

En Ustedes & Nosotros, de Teleuniverso, fue entrevistado por José Fabian y Grissel Genao, antes de partir a El Show de Nelson, en Canal 25. Manuel Peña, un amigo de la familia, le atiende el teléfono móvil y sigue de cerca sus pisadas.

“Lo de Martha es natural. Ella nunca ha estudiado música. La idea de participar fue de ella y su hermano Luis. Yo me fui de viaje y cuando vine a ver ella estaba en Argentina”, confiesa de sopetón un hombre que vive entre grasa y piezas de mecánica y ahora salta entre cámaras de televisión.

La nueva estrella llegará el lunes por el aeropuerto de Las Américas, donde será recibida por una multitud, además de funcionarios del gobierno y ejecutivos de Telesitema, canal que llevó las incidencias del concurso a los hogares dominicanos.

EL PADRE AGRADECE EL APOYO A SU HIJA

ORGULLO PATRIO: El orgullo por ser dominicano y la gratitud por la solidaridad que su país le ha brindado a su hija, es un himno que se repite en boca de Felipe Heredia. “El apoyo ha sido extraordinario.

Estoy muy agradecido. En un momento no me salían las palabras. Estamos orgullosos de ser dominicanos y orgulloso de que Martha lo sea”. A la hija que tiene dos meses y pico sin ver, la escuchó minutos después de que ella reafirmara su talento junto al venezolano Franco de Vita.

“Mi hija es fuerte, muy fuerte.

No lloró en la cámara pero después lloró bastante”, afirmó. Ronquito y con la mirada enrojecida, Felipe adelantó que harán una gran fiesta cuando ella regrese.