0:13

A Miguel Bosé la música, el arte y lo guerrero le viene en la sangre. “Ahí mismo, al lado de los glóbulos rojos, de las neuronas supongo que está sembrado mi amor por la música”, comenta el cantautor español de 54 años quien acaba de lanzar al mercado su más reciente producción, Cardio, cuyo primer sencillo promocional "Estuve a punto de…" ya está sonando en la radio.

Hijo del famoso torero español Luis Miguel Dominguín y de la actriz italiana Lucía Bosé, el artista fue amamantado “con el gusto por el arte, pero sobre todo por el apego a la justicia”, dice el cantautor cuyas primeras zapatillas de ballet las recibió de las manos de Pablo Picasso.

Aunque haber crecido dentro de un ambiente cultural, no le hizo más fácil el camino al autor de "Si tú no vuelves". “Toqué puertas, muchas. Como lo hace todo el mundo. Unas se abrieron, otras se cerraron. Pero las que se abrieron me han permitido estar aquí con vosotros más de treinta años".

Justamente para festejar sus tres décadas en el ambiente musical, Bosé lanzó al mercado Papito, producción discográfica que vendió más de dos millones y medio de copias y con la que recorrió la mitad del planeta con la gira Papitour, y hoy regresa tras cinco años de ausencia en el estudio de grabación.

¿Después del éxito rotundo de "Papito", no sentiste un poco de miedo de cómo la gente recibiría "Cardio"?
No, ¿por qué habría de sentirlo? No se puede comparar ningún proyecto. Si nos ponemos a pensar que un disco fue un éxito o un fracaso y nos medimos con esa vara, entonces nos paralizamos. Nos quedaríamos agazapados en la madriguera. Lo que tenía era una urgencia de escribir, de hacer cosas nuevas. Después de Papito estuve casi cinco años sin hacer cosas nuevas. Ya sentía la necesidad de escribir, de cantar, de meterme en el estudio.

¿Te gustó el resultado de tanta espera?, ¿estás satisfecho con Cardio?
Sí, la verdad que sí. Creo que este disco resume un poco lo que soy. Mi carrera hay un antes un después de Bandido (1984). Después de ese disco, toda mi carrera me pertenece. Todo forma parte de mi lenguaje. Allí fue cuando le dije a la casa disquera: ‘déjenme hacerlo a mí’. De repente se destapó un mundo con el cual hasta entonces solamente había coqueteado. Pero a partir de Bandido todo es muy Bosé. Aunque he cambiado mucho.

¿Cambios que se notan en "Cardio"?, ¿por qué el disco se llama así?
Sí porque la carrera de un artista está en constante evolución. Empiezas tratando de ir al colegio y luego te impones ir a la universidad. Con relación al disco, al principio no sabía cómo iba a llamarse. Pero pasaron los días y el nombre llegó porque Cardio en griego significa corazón y, eso tiene que ver con todo: con la vida con la muerte, con lo quirúrgico, con laboratorio. Si tuviese que editar una nueva revista la llamaría Cardio y, en ella podríamos hablar de cocina, de música, de política, de todo.

Siempre te has involucrado en causas sociales, pero el año pasado Juanes y tú estuvieron en el ojo del huracán por el concierto Paz sin fronteras...
Juanes y yo estuvimos metidos en alma y cuerpo en esto. En este disco hay un tema, "Júrame", que habla del proceso dolorosísimo que ambos pasamos. Nos dividimos las tareas y, aún así a veces sentíamos que nos faltaban fuerzas. Esta canción es como el diario de Miguel y Juanes, donde nos jurábamos el uno al otro que así estuviéramos solos en la Plaza de la Revolución (Cuba) seguiríamos hacia adelante.

¿Qué fue lo que más te sorprendió de "Cardio"?
El espíritu del disco. Hay de todo. Yo lo veo como una pasarela en la que cada canción se exhibe como quiere. Cada una tiene su propia forma de vestir y de contar su historia. Hay temas muy dark como "Dame argumentos", donde una relación de pareja acaba en un conflicto que no pueden resolver ni los abogados y termina a golpe de sierra mecánica, o una velada suplicante como "Por ti", donde un enamorado va casi suplicante, de rodillas a expresar todo lo que es capaz de hacer por amor.

También hay una pieza en la que hablas de dietas, de cocina, ¿es autobiográfica?
Sí, se llama "Ayurvédico". Sentí la necesidad de ponerme en forma para estar a la altura del nuevo proyecto. Pero primero tenía que limpiar mi organismo, antes de pretender adelgazar parte de las 230 libras que pesaba. Empecé por lo ayurveda. Tomando mucha cúrcuma. Es un tema que no tiene ni pies ni cabeza, sólo buen rollo y un estribillo sin sentido que dice: ‘Hey, your rice is beautiful’. Este tema surgió en un momento de explosión creativa.
Fuente: People

Tambien podria interesarte

0 comentarios

Popular Posts

Labels

Ggles