Broadcasting Standards Authority determinó que el comentario de Paul Henry, el pasado noviembre, fue cruel, de mal gusto, discriminatorio y denigrante, de acuerdo con la radio neozelandesa.

Henry dispone de un mes para corregirse en su programa "Breakfast", el mismo espacio televisivo en el que ofendió a la cantante de 48 años.

El 23 de noviembre de 2009, Henry mostró a los telespectadores una foto de Boyle en una revista y dijo que era evidente que la persona de la imagen "sufría de alguna forma de discapacidad intelectual".

Aunque el presentador se disculpó posteriormente, varios particulares interpusieron quejas ante la autoridad competente.