Una de las mejores noticias que nos ha dejado el fin de semana, ha sido el nuevo descuido de Rihanna, esta vez a la salida de una fiesta celebrada en Hollywood.

A la salida de esta, los fotógrafos esperaban como fieras para captar las mejores instantáneas de los invitados, y una vez más, la cantante de Barbados no decepcionó.
Por enésima vez, Rihanna llevaba un fino vestido con el que transparentaba absolutamente todo: transparentaba las tetas, los piercings de los pezones, el tatuaje que lleva debajo del pecho y por supuesto, también el tanga. Y lo mejor de todo es que a ella parece no importarle, porque sigue repitiendo experiencia cada mes.


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